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Cáncer colorrectal: Lo que debe saber sobre las pruebas de detección

Existen varias opciones revisadas y aprobadas o autorizadas por la FDA para la detección de cáncer colorrectal. Infórmese de cuál es la mejor para usted.

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X-ray illustration of digestive and colon area of body. Colon area highlighted with text "Colorectal Screening Options"

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La evidencia es clara – la detección de cáncer colorrectal puede salvarle la vida. En la actualidad, cada vez más personas optan por hacerse una prueba de detección de cáncer colorrectal. Como resultado, el número de personas mayores que padecen y mueren de cáncer colorrectal está disminuyendo de forma constante. La disminución de las tasas de tabaquismo en los estadounidenses también ha contribuido al descenso en los últimos años.

El cáncer colorrectal suele empezar por pólipos u otros crecimientos precancerosos en el recto o el colon (intestino grueso). La única forma de detectar un pólipo, un crecimiento precanceroso o un cáncer colorrectal es mediante una prueba o procedimiento de detección.

Los beneficios de las pruebas de detección son tan grandes que los médicos recomiendan que la mayoría de las personas empiecen a hacerse una prueba de detección de cáncer colorrectal a partir de los 45 años. Algunas personas con mayor riesgo de padecerlo pueden tener que empezar a hacerlo antes de los 45 años.

Sus opciones de pruebas de detección de cáncer colorrectal

Los distintos métodos de detección de cáncer colorrectal tienen diferentes ventajas y desventajas.

  • Frecuencia – Algunas pruebas de detección son mejores para detectar el cáncer. El estándar de oro para la detección, una colonoscopia, sólo tiene que realizarse una vez cada 10 años para las personas con un riesgo medio si no se encuentran cambios precancerosos.
  • Lugar –Algunas muestras de análisis pueden obtenerse en la comodidad y privacidad de su propia casa. Otras pruebas de detección deben realizarse en un consultorio médico u hospital.
  • Sedación – Algunas pruebas de detección requieren anestesia (medicamentos para el dolor) y sedación. Su médico hablará con usted sobre su historial de salud y sus preferencias para personalizar el tipo de medicamento para el dolor y sedación que necesitará durante el procedimiento.
  • Limpieza de colon – Algunas pruebas de detección requieren que tome un medicamento recetado antes del procedimiento para limpiar todas las heces del colon y el recto. Este proceso de limpieza, a veces llamado "preparación del intestino", puede ser incómodo y normalmente tendrá diarrea varias horas antes del procedimiento.
  • Riesgos y beneficios – Los procedimientos que requieren sedación y en los que el médico examina el interior del colon y el recto tienen riesgos más graves. Sin embargo, la probabilidad de sufrir daños durante una prueba de detección de cáncer colorrectal es pequeña, y la posibilidad de salvar su vida es alta.
  • Procedimientos de seguimiento – La mayoría de las pruebas requieren que se realice una colonoscopia, el estándar de oro para la detección, si el resultado de la primera prueba no es normal.

Muchas personas consideran que la incomodidad temporal del procedimiento de detección invasivo vale la pena para tener tranquilidad a largo plazo. Hable con su médico para saber qué prueba de detección es la mejor para usted.

Pruebas de detección de cáncer colorrectal: Revisadas y aprobadas o autorizadas por la FDA

La Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. revisa y autoriza o aprueba las pruebas de detección de cáncer colorrectal, los medicamentos recetados y los dispositivos médicos utilizados durante las pruebas de detección de cáncer colorrectal.

Actualmente hay dos pruebas recomendadas para la detección de cáncer colorrectal:

  • Pruebas de muestras de heces (caca) 
  • Procedimientos de detección visual como la colonoscopia (los médicos utilizan dispositivos médicos para observar el interior de su colon y recto)

Se pueden realizar otros tipos de pruebas de detección, pero normalmente se recomiendan sólo cuando no se puede realizar una prueba de muestras de heces o un procedimiento de detección visual. Existe una prueba de sangre aprobada por la FDA para las personas que optan por no hacerse una prueba de muestras de heces o que se médico realice un procedimiento de detección visual.

Pruebas de muestras de heces

Su médico puede recetarle una prueba de heces que se realiza en casa. El kit se usa para analizar sus heces en busca de sangre o ADN (o ambos) de cáncer colorrectal. Algunos tipos de pruebas de muestras de heces deben realizarse una vez al año. Otros tipos deben realizarse al menos cada 3 años, o con mayor frecuencia si su médico lo recomienda.

Si la prueba muestra sangre o posible ADN de cáncer o de un pólipo precanceroso, su médico ordenará una colonoscopia u otro tipo de prueba de detección visual para obtener más información.

Detección visual

La detección visual consiste en que un médico especialista utilice un dispositivo médico para observar el interior del colon y el recto en busca de pólipos u otros crecimientos anormales que puedan ser cancerosos o precancerosos. Estos procedimientos suelen requerir una limpieza de colon o una preparación intestinal el día anterior. Algunos tipos de pruebas de detección visual requieren sedación o anestesia general. La detección visual debe realizarse en el consultorio médico u hospital.

  • Colonoscopia — Un médico utiliza un tubo delgado con una luz, una cámara y herramientas quirúrgicas para observar el interior del recto y el colon en busca de crecimientos, otro tejido anormal o cáncer. Si el médico observa algún pólipo precanceroso o crecimiento anormal, puede extirpar el tejido durante el procedimiento. La extirpación de pólipos durante una colonoscopia suele evitar que se conviertan en cáncer más adelante.
  • Sigmoidoscopia flexible — El médico utiliza un tubo delgado con una luz, una cámara y herramientas quirúrgicas para observar el interior del recto y el tercio inferior del colon en busca de crecimientos, otros tejidos de áreas anormales o cáncer. Si el médico observa algún pólipo precanceroso o crecimiento anormal, puede extirpar el tejido durante el procedimiento. La extirpación de pólipos durante una sigmoidoscopia suele evitar que se conviertan en cáncer más adelante.
  • Colonografía por tomografía computada (TC) o (“Colonoscopia virtual”) — Una serie de radiografías, similares a una tomografía computada, del colon. El colon se infla suave y temporalmente con aire a través de la punta de un tubo delgado colocado en el recto.

La Dra. Jacqueline Cunkelman, funcionaria médica de la Oficina de Evaluación y Calidad de Productos  (en inglés) del Centro de Dispositivos y Salud Radiológica de la FDA, afirma: "La ciencia es clara: la colonoscopia salva vidas. Hable con su médico. Comparta con él sus temores o preocupaciones sobre las pruebas de detección de cáncer de colon. Juntos pueden decidir qué tipo de prueba de detección es la mejor para usted".

Algunos grupos minoritarios corren un mayor riesgo

El cáncer colorrectal es más común entre ciertos grupos raciales minoritarios. En todos los grupos, los hombres tienen una probabilidad significativamente mayor de padecer y morir de cáncer colorrectal. En comparación con los hombres y mujeres blancos no hispanos, los hombres y mujeres de raza negra tienen el mayor riesgo de padecer y morir de cáncer colorrectal. Los indios americanos y los nativos de Alaska también corren un mayor riesgo de morir a causa de cáncer colorrectal.

Las comunidades de minorías raciales y étnicas se han enfrentado a menudo a mayores barreras para la prevención, detección y tratamiento de muchas enfermedades y, lamentablemente, eso incluye el cáncer colorrectal, dijo la contraalmirante Richardae Araojo, comisionada asociada para la Salud de las Minorías y directora de la Oficina de Salud de las Minorías y Equidad en Salud (en inglés). Estas barreras pueden incluir el acceso a la atención de la salud, el acceso a alimentos saludables, la situación del seguro médico y el transporte, por nombrar sólo algunas. "La detección temprana, la derivación y el tratamiento pueden reducir significativamente las disparidades en las muertes por cáncer colorrectal".

Las tasas de cáncer colorrectal aumentan entre los adultos menores de 50 años

Aunque las tasas de cáncer colorrectal están disminuyendo entre las personas mayores, las tasas están aumentando entre los adultos de 40 años o menos. El cáncer de cualquier tipo es poco frecuente en personas menores de 50 años, pero las cifras muestran que el cáncer colorrectal ya no es sólo una enfermedad de los adultos mayores.

Los investigadores no están seguros de por qué las tasas están aumentando en los adultos jóvenes, pero animan a las personas de todas las edades a estar atentas a los cambios significativos en sus hábitos intestinales y en las heces (caca). La sangre en las heces y otros problemas estomacales como gases, estreñimiento, dolor, vómitos, pérdida de peso inexplicable, o hinchazón abdominal pueden ser un signo de cáncer colorrectal. Pero estos síntomas pueden estar causados por muchos problemas de salud diferentes, así que lo mejor es que hable con su médico o enfermera.

¿Cómo puedo reducir mi riesgo de cáncer colorrectal?

Además de someterse a las pruebas de detección de cáncer colorrectal, todos podemos reducir el riesgo de padecerlo mediante comportamientos saludables. Entre los comportamientos comprobados para prevenir el cáncer colorrectal se encuentran:

  • Actividad física – Los estudios demuestran que hacer ejercicio con regularidad puede reducir el riesgo de cáncer colorrectal en un 24%. Para obtener beneficios sustanciales para la salud, los expertos recomiendan hacer entre 30 y 60 minutos de ejercicio la mayoría de los días de la semana. El ejercicio puede incluir actividades cotidianas como pasear al perro, realizar tareas domésticas o subir escaleras.
  • Reducir el consumo de alcohol – Los estudios demuestran que tomar 3 o más bebidas alcohólicas al día aumenta el riesgo de cáncer colorrectal en un 41%.
  • No fumar – Los estudios demuestran que las personas que fuman tienen un 18% más de riesgo de cáncer colorrectal.
  • Mantener un peso saludable – Los estudios demuestran que las mujeres con obesidad tienen un 45% más de riesgo de padecer y morir de cáncer colorrectal.

Si tiene 50 años o más, puede hablar con su médico para saber si tiene ciertos factores de riesgo de padecer enfermedades cardíacas o cáncer colorrectal, y si debería tomar una dosis baja de aspirina para ayudar a prevenir estas enfermedades. Aunque la aspirina es de venta libre, al igual que cualquier otro medicamento, su consumo conlleva riesgos y beneficios. Hable con su médico antes de tomar aspirina para prevenir el cáncer colorrectal o las enfermedades del corazón.

Para más información

Para obtener más información sobre la prevención o las pruebas de detección de cáncer colorrectal, visite el sitio web del Instituto Nacional de Cáncer (NCI, por sus siglas en inglés) o llame al Servicio de Información sobre el Cáncer (CIS, por sus siglas en inglés) del NCI al 1-800-4-CANCER (1-800-422-6237).

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